Cuando se presenta un caso de investigación, hay varias cosas que son imprescindibles:

  • Una cámara de fotos (el móvil puede servir)
  • Papel y boli (puede parecer muy tonto pero a veces no es fácil de encontrar en determinados entornos)
  • Un disco duro externo
  • Un USB con Knoppix, listo para ser ejecutado
  • Software de recuperación de archivos eliminados
  • Software de recuperación de correos eliminados
  • Herramienta de comparación de ficheros
  • Un par de DVDs grabables
  • Ordenador portátil

En función de cómo sea el asunto, unas cosas serán más imprescindibles que otras y si contamos con conexión a internet, bien a través de la propia empresa o bien a través de nuestro móvil, la cuestión se simplifica bastante porque podemos utilizar herramientas que tengamos en la nube, o bien en Dropbox, en Drive o quizás en nuestro propio e-mail.

El móvil en este caso resulta de extrema utilidad, con la propia aplicación de grabadora de sonidos podemos ir dictando los pasos que vamos dando o grabar las conversaciones con el cliente, eso si, siempre indicando que la conversación está siendo grabada por motivos de la realización del informe. Es importante dar a conocer este dato al interlocutor. Si realizamos llamadas telefónicas, una aplicación que las grabe nos servirá de mucha utilidad para no llamar cuatro veces al abogado para que nos haga una explicación detallada que ya nos hizo hace unas cuantas llamadas.

Es un gesto de profesionalidad que ellos van a valorar de una forma muy especial, porque es poco habitual y realmente el coste de realizarla es ínfimo.